El sábado en Lollapalooza Argentina fue una jornada inolvidable para los amantes del pop. Desde el primer acorde hasta el último aplauso, Tate McRae y Shawn Mendes fueron los encargados de encender el festival con su carisma, talento y conexión con el público.
McRae subió al escenario con una presencia arrolladora y un setlist que recorrió sus grandes éxitos. La canadiense interpretó temas como 2 Hands, Exes y su éxito viral Greedy, que desató la euforia de la multitud. Sorprendida por la calidez del público argentino, la cantante no dudó en expresar su emoción: «Me habían dicho que el público de Argentina era el mejor, pero no esperaba algo así», dijo antes de ponerse la camiseta número 10 de Lionel Messi, desatando una ovación ensordecedora.
Poco después, fue el turno de Shawn Mendes, quien apareció en escena con su guitarra en mano para regalar un show emotivo y poderoso. El canadiense hizo cantar a todo el predio con temas como There’s Nothing Holdin’ Me Back, Wonder y Treat You Better. Con su característico carisma, intentó hablar en español y agradeció a sus fans: “No tengo muchas palabras, pero la energía aquí es la más fuerte que podamos sentir. Necesito respirar”, dijo entre risas.
Uno de los momentos más especiales de la noche llegó cuando Mendes interpretó un fragmento de Gracias a la vida, la icónica canción de Violeta Parra, popularizada en Argentina por Mercedes Sosa. Este gesto conmovió al público, que respondió coreando cada palabra. La lluvia, que comenzó a caer en los minutos finales de su presentación, le dio un toque cinematográfico a la despedida del artista, haciendo del cierre un instante aún más mágico.
Tate McRae y Shawn Mendes, dos estrellas que hicieron historia en Lollapalooza
Ambos artistas demostraron por qué son dos de las figuras más queridas del pop actual. Entre ovaciones, sorpresas y momentos emotivos, Lollapalooza Argentina vivió una jornada histórica donde Tate McRae y Shawn Mendes dejaron su huella en el festival.
Fuente: Billboard
